miércoles, 14 de marzo de 2012

La señora Mendoza capitulo 1

Capitulo 1 inicios




Un joven venia llegando en su camioneta 4 x4 muerto de la calor a un pueblo que de milagro salía en el mapa llamado aguas negras no tenía la menor idea como llegar a la hacienda ni menos hacerse cargo de ella solamente por que lo pillaron acostado en la cama de sus padres con la empleada y termino en este pueblo alejado de la mano de dios. Castigado casi exiliado de Bogota a la pobre sirvienta despedida sin carta de recomendación por dios tenia veintitrés años solo hacia lo que cualquier varón a esa edad hace. Salió del coche secándose con un pañuelo el sudor viendo que si encontraba un ser viviente seria de puro milagro.



Se alegro por que vio que una camioneta vieja de color rojo se acercaba seguro el sabría decir donde quedaba la hacienda de aguas negras, la hizo para y pregunto, el señor le dio las coordenadas las cual entendió un poco nada mas, no por que fuera idiota si no porque el señor hablaba bien cantado.

Condujo hasta donde le dijeron que daba la hacienda, al principio pensó que se había quedado el lugar se estaba cayendo a pedazos, como su padre lo pudo mandar a un lugar así, entro al lugar cuando abrió la puerta todo andaba bien hasta que sintió un golpe que lo hizo saltar, la puerta se había caído de milagro no lo aplasto. Siguió caminado para ver si había algo rescatable en la hacienda tendría que comprar muchas cosas para repararla y hacerla un lugar decente no podía volver su padre le dijo que si volvía no le daría la presidencia de ecomoda estaba condenado a permanecer en aquel lugar tan horrible, y anoto nunca más acostarse en la habitación de sus padres.



Escucho que su padre le dijo que fuera a preguntar al cuidador que vivía en alguna parte de la finca no se acordaba donde, pero seguro no hacia bien su trabajo por que el pudo entrar sin ningún problema, bueno igual quien vendría robar a un lugar que se esta cayendo.



-Disculpe señor que hace aquí apuntándolo con una escopeta. Váyase de aquí



-Baje esa arma usted debe ser Ruben yo soy el dueño de la hacienda y vine a intentar hacerme cargo de ella hasta que mi padre decida cuando puedo regresar. Pero la verdad no tengo la menor idea que hacer yo soy de ciudad.



-Disculpe bajando el arma, esta tierra es muy fértil si se trabaja puede dar muy buenos resultados, mas allá ud puede encontrar termas que pertenecen a su familia, un pequeño lago natural, es hermosa su hacienda solo que nadie le ha dado las atenciones que se merece. Hay que trabajarla si. Muchas personas quieren comprar la hacienda, pero yo le recomiendo que no lo haga perdería mucho dinero. Hay una mina de cobre sin explotar.



-Me esta hablando en serio



-Si señor, no se que tanto cobre tiene pero esta



-Me ayudara a resolver estos problemas verdad



-Para eso estoy señor. Le voy a arreglar esto apuntando la puerta



-Si por favor mientras me doy un baño



-No hay agua caliente señor, aquí solo se baña con agua helada, no hace falta todo el año hace calor por aquí.



-Esta bien, habrá que acostumbrarse a estas incomodidades.



Armando jamás en su vida se había duchado con agua helada, el mar y las picinas no contaban , con un frio horroroso se seco, se puso ropa fresca y deportiva en ese lugar los ternos no funcionaban.



Cuando salió la puerta estaba puesta la casa pues había que pintarla, por que desteñía y hacerle muchos arreglos hablaría con el cuidador para que le dijera donde podía encontrar un lugar para comprar ferretería y para tomarse algo.

Armando lleno la camioneta con cosas para arreglar la casa el no iba a vivir en un lugar insolubre,, estaba muerto de calor y paso a la fuente de soda, a beberse una cerveza para la calor, parecía un lugar limpio y decente sentándose en una mesa que quedaba en el rincón de la mesa.



-Que se va servir señor



Armando se le queda mirando era una joven muy hermosa, parecía tener unos dieciocho años de nada más, quizás no sería tan aburrido este pueblo.



-Una cerveza bien helada



-En seguida se la traigo señor.



Armando se quedo mirando a la jovencita minuciosamente tenía grandes atributos que podrían calificar para entrar a su cama, sin lugar a dudas ella sería una de sus compañeras en ese pueblo. A los minutos regreso con la cerveza helada que el señor había pedido.



-Como te llamas pregunto Armando

-Beatriz y usted



-Armando un gusto, hace mucho que trabajas aquí



-solamente el verano trabajo. Mi padre es el dueño el resto del tiempo lo paso estudiando, diablos ya llego lo detesto.

-Quien es ese hombrecito



-Mi supuesto novio, pero yo no estoy interesada en el me quieren obligar a estar con ese fantoche. Lo dejo me iré a esconder. Que lo disfrute.



Así fue como Armando y Beatriz se hicieron amigos, el iba todos los días a la fuente de soda, ya se sabia el horario en que el padre de Beatriz no estaba en la casa, y las horas en que ella estaba sola, su plan de seducción pronto tendría efecto ya no aguantaba más lo tenía completamente loco.



Beatriz se sentía especialmente emocionada hoy día no sabía por que pero deseaba que llegara Armando , en ese lugar pues no había mucha que hacer , y había resultado un hermosa compañía, sin mencionar el hecho que era demasiado guapo y se podía tener conversaciones inteligentes no como con Nicolas que solo se habla de comida. Habia llegado puntualmente le fue a dejar su cerveza y se sentaron a conversar largo rato.



-Por que no me muestras la fuente de soda por dentro Betty



-Claro ven sígueme.



Armando delineaba con su mirada la parte trasera de Beatriz imaginándose lo que había por delante, seguro era mejor de lo que había por atrás, intento tocarlo pero su mano se quedo en el aire, la podía asustar y todo se arruinaría.



Beatriz inocentemente le fue mostrando las dependencias de la fuente de soda, hasta que llegaron al sector de las habitaciones.



-Es todo Armando lo demás son las habitaciones



-Me muestras la tuya tengo curiosidad de saber como es.



Beatriz dudosa lo conduce a su habitación que quedaba al final del pasillo alejada de todo, su padre lo prefirió asì para que nadie se acercara al campo santo de su hija.



-esta es Armando



El había cerrado la puerta con pestillo sin que Betty se hubiese dado cuenta fue un movimiento rápido, abrazo a Betty por detrás, haciéndola temblar por el repentino ataque de Armando.



-Armando que haces.



Armando la da vuelta y la besa era un beso tierno que pronto se fue haciendo desesperado por ambos, las manos de Armando navegaban por el cuerpo de Beatriz lo había soñado tantas noches que ahora que podía tocarlo, sentía que lo añoraba más.



-Armando yo nunca



-has Estado con un hombre



-No



-Tranquila solo déjate llevar por mi.



Betty asintió sus labios fueron devorados por los de Armando, saber que iba ser el primero lo había excitado demasiado, le saco el vestido dejándola solamente en ropa interior, mientras le besaba, se iba deshaciendo se su camisa haciendo que callera al piso, Betty estaba toda ruborizada, no miraba el torso desnudo de Armando . el la acostó suavemente en la cama subiéndose arriba de ella para poder acceder más a ella, mientras le sacaba el brasier y dejar sus senos al descubierto. Armando se despejo de su pantalón quedando solo en sus calzoncillos. Betty sintió el vulto de armando en su entre pierna era enorme y duro, se asusto un poco.



-Tranquila es normal no están malo como parece



Beatriz se relajo mientras Armando hacia estragos en su cuerpo, olvidándose por completo que su padre regresaría más temprano de lo normal por un problema que se presento en la fuente de soda. La despojo de la ultima prenda que le quedaba a ella viendo su cuerpo desnudo por completo era de una virgen era el primero que navegaba por esos parajes vírgenes. Con ayuda de sus manos se saco su ropa interior quedando en iguales de condiciones.



-Lista, dolerá un poco pero no lo puedo evitar pero te recompensare.



-Hazlo Armando confió en ti.



Armando sonrió ante eso que le dijo y comenzó a entrar en ella, notando como el cuerpo de ella se tensaba ante esa invasión, Y llego a donde quería llegar comprobar si de verdad era virgen poco a poco fue entrando ella, se le salieron unas lagrimas de dolor y se afirmaba en su espalda, se quedo en esa posición un rato susurrándole palabras para consolarla, pronto su cuerpo involuntariamente comenzó a moverse, de esa forma tan particular que lo volvía loco. Beatriz se retorcía de placer debajo de Armando, el la estaba llevando al cielo y la bajaba en el mismo momento cuando salía de ella.



Sus cuerpos se tensaron, pronto llegarían su gran placer, Armando acelero sus movimientos el sudor corría por su rostro. Haciendo que la cama hiciera extraños sonidos, pronto se escucho un gutural sonido de placer. El se quedo mirándola a los ojos lla los tenia negros y brillante pequeñas gotas de sudor a los costados de la nariz.



-Estas bien perdón si fui muy bruto no lo pude evitar.

-No tranquilo fue muy lindo Armando

-Si lo fue Betty.



Armando salió del cuerpo involuntariamente ambos se quedaron completamente dormidos, sin saber lo que sucederìa unos minutos después.



-Joven me haría el favor de levantarse



-Papà esto no baje eso no sea loco.



-Usted no me hable desvergonzada mire hacia la pared mientras el señor se viste.



-Tranquilo señor Armando estaba palido lo estaban apuntando con un arma.



-Ahora ud dese vuelta mientras se viste aunque no se que sentido tiene.



Beatriz estaba roja vistiéndose mientras su padre y armando de espaldas a ella, lloraba en silencio su maldita suerte y su estupidez de quedarse dormida.



-Bien en vista que ya están decentemente vestidos nos vamos al registro civil



-Y eso para que señor



-Para casarlos por supuesto



-Queeeeeeeeeee



-Ud deshonró a mi hija y se casara con ella a menso que le haga un agujero en la cabeza usted decide.



-Pero papá cálmese si podemos hablar



-No Beatriz Aurora Solano, mi apellido se lo regresare cuando este casada con este rufián ya camine y no se haga el inteligente conmigo.



Armando iba como si lo estuvieran llevando al matadero el no aprendía, nada debió haberlo hecho en otro lugar y ahora como salía de eso.



-Señor seguro no hay horas, y testigo uno no se pude casar sin testigos.



-Aquí siempre hay horas no es un pueblo que hayan muchos matrimonios así le damos trabajo al holgazán de Lautaro y los testigos nos están esperando, que de eso me encargo yo ud preocúpese del si y de firmar esos papeles.



Desalentado camina entraron al recinto efectivamente todos se alegraron de celebrar un matrimonio, en el pueblo, se hicieron los preparativos las tías de don Hermes serian las testigos de la boda.



El matrimonio se realizo con prontitud, se cuchicheaba que la hija de Hermes estaba en estado y por eso se cansaba con el nuevo del pueblo.



-Perfecto ahora mi hija es su responsabilidad, haga con ella lo que quiera, se arruino su vida Beatriz.



Armando y Beatriz se sentaron en la acera, ambos estaban confundidos sin saber que iban hacer.



-Y ahora que hacemos Armando.



continuara...

No hay comentarios:

Publicar un comentario